sábado, diciembre 23, 2006

El Vacceo Errante

Ayer estuve en la presentación del disco del Vacceo Errante, y descubrí que el Rock se puede oír sentado.

Me trajo muchos recuerdos del pasado y alguno del presente; y hoy he sido consciente al leer el libreto de su CD, en el que sale mi nombre, que el subconsciente también afecta al oído, y que lamento que éste sea un sitio público para no poder decir que creo del futuro.

Hoy, una de las pocas honrrosas excepciones, en las que no plagio la foto que acompaño, aunque sí el diseño gráfico.

A E.V.E. sólo decirle que espero que le gustase el trabajo, y que me encantó aquella tarde; y que si me quiere de nuevo ahi estaré.

Y a C., que espero oír en el proximo CD: "No hay amor sin pena,Pena sin dolor,Ni dolor tan agudo,Como el del amor.", porque es verdad, porque suena bien (a mi amoga le gustó más que la de L.B.D.) y porque no hay que pagar derechos de autor. (Quiza que yo la quisiese oír un día concreto de mi vida fue una señal que no supe ver)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias, es muy bonito eso que has escrito. Lamento no haberlo visto antes.

J.M.R.G.