Hoy, en mi intento de vaciar mi vida (cuarto) de cosas, he reanudado mi labor de limpieza-mercadillo. Sin duda soy candidata clara para el Síndrome de Diogenes, no puedo tirar nada, pero habiendo encontrado un destinatrario para los sellos de mis cartas me he dispuesto a deshacerme de ellas, o al menos de la gran mayoría de ellas, y así hoy he visto pasar mi vida ante mí como ya nunca más podre hacerlo, mediante pedazos de papel que con suerte tendrán una nueva vida en la que recoger nuevas vidas.
Y así hoy he recordado:
- Lo divertido que era tener 16, 18, 20 (la mitad de lo que me queda por vivir por recuperarlo)
- Promesas incumplidas y mentiras patentes
- La droga que recibí aquel verano de carta diaria a la Moraleja
- La letra minuscula plagada de jeroglificos que dejaban entrever a un artísta que se sentía bien
- Las movidas que monopolizaron tus conversaciones y dividieron tus caminos
- Una sinceridad que ya ni recordabas en palabras olvidadas
- Malos momentos
- Amigos invisibles de letra cursiva y navidades epistolares
Y así hoy he recordado:
- Lo divertido que era tener 16, 18, 20 (la mitad de lo que me queda por vivir por recuperarlo)
- Promesas incumplidas y mentiras patentes
- La droga que recibí aquel verano de carta diaria a la Moraleja
- La letra minuscula plagada de jeroglificos que dejaban entrever a un artísta que se sentía bien
- Las movidas que monopolizaron tus conversaciones y dividieron tus caminos
- Una sinceridad que ya ni recordabas en palabras olvidadas
- Malos momentos
- Amigos invisibles de letra cursiva y navidades epistolares
- Tantos cumpleaños como viajes
- Aquellas cosas que por aquel entonces nos gustaban
- El intento de hacer el camino allá por el 98
- La carta de aquel amor que no recordaba haber recibido nunca y que imagino me haría la persona más feliz del mundo con sus tres folios.
- Y la carta de amor que gane en aquella apuesta y que más tarde se usaría como ejemplo valioso.
- Gente que paso por mi vida
- Gente que siguiendo en mi vida ha crecido
- ... y tantas cosas que me levantaron del sofa para venir aqui a intentar que cuando las cartas ya no esten no se me olviden, de haberlas conservado fisicamente jamás hubiese recordado.
PD: Espero que recibas pronto esta carta, que pases buenas vacaciones, tengas un feliz cumpleaños, te des por enterad@ de mi desastre de verano, me des tu opinión, pases unas felices fiestas, y sepas que lo siento, te perdono, me alegro mucho por ti y te quiero. Sin más que decir, un beso, ORDELINA
3 comentarios:
Una vez más te tengo que felicitar: me ha encantado este escrito.
Enhorabuena :)
gracias
y por cierto, que fue de Mañolico?
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